Siete años viviendo aquí. Otros tres más en relación con una chica de aquí, a la que conocí justo al marcharme. Y llevaba 20 meses sin venir.
Todo sigue igual, y todo es diferente.
Una vez más, los recuerdos parecen partes de películas que vi en mi vida... no tanto como vivencias personales. Es curioso cómo tengo una sensación más viva ante la posibilidad de haber presenciado en vivo ciertos diálogos y momentos cinematográficos, que ante muchas de mis experiencias pasadas.
Hoy veo cuánto ha (y he) cambiado desde que estuve en esta ciudad por última vez, habiendo aterrizado de regreso de NYC. Recuerdo lo que pensaba, cómo me sentía, lo que decía y hacía... Y no me identifico conmigo mismo. Me pregunto cómo pude estar tan perdido, en un momento tan avanzado de mi vida.
Y no puedo más que reforzar mi impresión de esta última temporada, de duda, de desconfianza, de incredulidad de mí mismo y de los designios de mi propia mente.
Alojado en casa de mi hermana Elisabet, y no estando ella en la ciudad, disponiendo de su piso para mí, lamo y mastico mi soledad sin huír de él. Estoy a punto de vivir unos días que no puedo ni calificar ahora mismo.
Os mando mi cariño, disfruto de echaros de menos, y me voy a dar un paseo por la noche de esta ciudad tan reptiliana: viva, pero de sangre fría.
Gabon, anaiak.
¿Ha visto usted a este hombre?
Hace 2 años
La vida te lleva por caminos que nunca andarias en tu dia a dia. Disfruta de la ciudad, de su conocimiento y desconfianza. Haz lo que tengas que hacer y vuelve a nosotros fortalecido y entero.
ResponderEliminarTe necesitamos aqui. Un beso copito. Disfruta.
Disfruta muchísimo de la meditación, crece, Copito, crece!!Por aquí nos acordaremos mucho de ti y te esperamos impacientemente. Hasta pronto, ya estoy deseando que compartas la experiencia con nosotros. Un abrazo cuasi-gay, amigo.
ResponderEliminarPásate por las ramblas, a ver si pillas cacho del bueno, que tienes tanto amor que dar, que lo tienes que canalizar de alguna manera...
ResponderEliminarSea como fuere, aprende de los acontecimientos pasados pero no te enquistes en ellos, pues sólo con la mente abierta y el espíritu en paz se puede ser capaz de disfrutar cada instante y atesorarlo como se merece.
Pasa página, sigue escribiendo y aprende.
Con cariño. Alf
Muchas gracias a los tres.
ResponderEliminartres tesoros encontrados recientemente... "La vida te da sorpresas. Sorpresas te da la vida, ay, dios!"